Pasar una tarde –o una mañana– en un museo es uno de los mejores planes que podemos hacer con los niños. Madrid es una ciudad que destaca por tener algunas de las mejores pinacotecas europeas; entre ellas, el museo Reina Sofía destaca por albergar algunas de las mayores joyas pictóricas contemporáneas, y por ser un lugar absolutamente inspirador y en continuo movimiento. Además de poder disfrutar de su colección permanente o de sus exposiciones temporales, el Reina ofrece muchos talleres para niños y familias. Y por si todo ello fuera poco, también está NuBel, su nuevo restaurante, que se erige como un lugar perfecto para pasar el rato con los más pequeños antes, después o entre medias de nuestra visita al museo.
NuBel ofrece un espacio amplio, luminoso y con todas las facilidades para ir tanto con bebés como con niños grandes y pequeños. Su nombre es un españolizado homenaje a Jean Nouvel, el famoso arquitecto francés que en 2005 se encargó de la ampliación del insigne edificio. El restaurante, enclavado en dicha ampliación, se ha adaptado perfectamente a su espacio. El cristal, el acero y los círculos de colores –de las alfombras, sofás, barras, lámparas, platos y taburetes–, aportan a los más de 800 metros del NuBel un ambiente imponente y realmente atractivo. Sin embargo, lo que hace del restaurante del Reina Sofía un lugar especialmente cómodo para ir con niños es que han conseguido reunir todo aquello que las familias necesitan para estar a gusto cuando llevan a toda la prole: espacio, comodidades técnicas, una carta adaptada y un espíritu kid friendly.
El restaurante es espacioso y a la vez acogedor. Luminoso y cálido, tiene capacidad para mucha más gente de la que suele acoger, por lo que, resulta fácil estar cómodos con toda la tribu. El tamaño de los muebles resulta muy confortables para los más pequeños y además cuenta con una amplia terraza que, al estar cubierta, puede permitirse el lujo de abrir todos los días del año. También, en NuBel los baños son amplios y están equipados con cambiador. A todo esto hay que añadir su amplia, saludable y adaptable oferta gastronómica. Se puede pedir comida a cualquier hora, algo que sin duda es de agradecer pues, muchas veces, no es fácil adaptar los horarios infantiles a los planes de fin de semana. Brunch diario, aperitivos, comidas, meriendas y cenas, y en todas ellas platos apetitosos y fáciles de compartir con los más pequeños. Asimismo, los niños menores de doce años también tienen su propio menú infantil de medio día en el que pueden elegir entre milanesa de ternera con patatas, hamburguesa especial de la casa o pasta napolitana y que incluye pan, bebida y postre. Además, las meriendas en NuBel disponen de un amplio catálogo de bollería y tartas que no les dejará indiferentes.
La oferta de NuBel se completa con actuaciones musicales en directo todos los días; por horario, las más adecuadas para disfrutar con los niños son las de los sábados y domingos a las doce del medio día. Ocasionalmente, también hay alguna a las cuatro de la tarde. Pasar un día de museo con los más pequeños nunca tuvo tantas facilidades.
- Precios
- Horario
- Dirección
- Teléfono
- Online
Deja tu comentario